Tuxtla Gutiérrez, Chis. 22 Abril.- Personas armadas atacaron el sábado la sede de la Organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal y permanecen amenazando la vida, seguridad e integridad de mujeres, niñas y niños en su mayoría, denunció el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (Frayba).
El Gobierno de Chiapas, por su parte afirmó que ha “corroborado que la comunidad se encuentra en paz y sus habitantes trabajando de manera normal, sin embargo la autoridad estatal se mantiene atenta a cualquier situación que se presente”.
El Frayba afirma que desde las 18:45 horas “se comenzaron a escuchar disparos de armas de fuego en los alrededores de Acteal, municipio de Chenalhó”, por lo que mujeres, hombres, niñas y niños corrieron a refugiarse”.
Dijo que “los disparos se escuchaban salir desde la casa de Javier Luna Pérez, integrante del Partido Verde Ecologista de México” (PVEM).
El organismo que preside el obispo, Raúl Vera López, manifestó que a las 23:16 horas, aproximadamente, “el grupo armado comenzó a destruir la casa que Las Abejas, habían construido a orillas de la carretera.
“En ese momento ya eran aproximadamente 15 personas, entre ellas Antonio Gómez, presidente del Consejo Pacifista Sembradores de Paz”, quienes “dispararon a un foco del alumbrado público, quedando a oscuras la zona”.
El Frayba dijo que la agrupación “denuncia estos hechos para evitar algún daño a la vida, seguridad e integridad, ya que las personas armadas aún se encuentran en el lugar” y este domingo “tiraban piedras al espacio donde se realizaba la conmemoración mensual de La masacre de Acteal”.
Entre las personas que Las Abejas han identificado como agresores se encuentran, Juan Vázquez Pérez, Mariano Luna Vázquez, Juan Gabriel Luna Vázquez, Esteban Pérez Gutiérrez y Pedro Oyalte Vázquez.
De acuerdo a los testimonios de un integrante de Las Abejas de Acteal, “ayer nos hizo muy presente la masacre; revivimos nuestro dolor, porque quienes destruyeron el alambrado y la casa, han seguido la forma como actuaron los grupos paramilitares el 22 de diciembre de 1997, para desalojarnos. No sólo actuaron desde la carretera, también se escucharon disparos cerca del río”.