Encarcelan y torturan a evangélicos en Altamirano

Fredy Martín Pérez

Comitán de Domínguez

Católicos tradicionalistas de la comunidad San Miguel Chiptic, del municipio de Altamirano mantienen encarcelados y torturan a Samuel Vázquez Sánchez y a su hermano Juan Vázquez Álvarez, en represalia por predicar el Evangelio en esa comunidad, denunciaron miembros de la Iglesia Adventista del 7o Día.

En un comunicado, dieron a conocer que el pasado 23 de mayo, Samuel fue detenido por los pobladores de San Miguel Chiptic, pero cuando su hermano Juan se enteró de los hecho y se plantó ante las autoridades para saber qué ocurría, entonces procedieron a detenerlo y encarcelarlo a él.

Los habitantes de la comunidad anunciaron que solo los dejarían en libertad, si la familia pagaban una multa de 50 mil pesos por cada uno de ellos.

Los evangélicos aseguran que los dos jóvenes son torturados por los católicos, al grado de que este domingo “ya no pueden hablar debido a las lesiones físicas que ha sufrido”.

Los miembros de la Iglesia Adventista han pedido hablar con funcionarios federales, estatales y municipales, pero “hasta el día de hoy no han querido intervenir” para solucionar este caso.

Los evangélicos dieron a conocer que hace cinco años, Agustín Álvarez, fue expulsado de su comunidad, por ser miembro de la Iglesia Adventista y después de denunciar los hechos ante el Ministerio Público, se emitió una orden de aprehensión, “sin que hasta el momento” sea ejecutadala la orden de captura.

El 15 de marzo, tres familias adventistas les destruyeron sus hogares y fueron expulsados del lugar, “por causa de su fe cristiana”.

De entonces a la fecha son ya seis las familias que sido expulsadas de la comunidad.

Dieron a conocer que el 22 de marzo, se firmó una minuta de trabajo, con el fin de encontrar una solución a la problemática, con funcionarios del gobierno estatal y federal, pero en el caso del municipal se negó a dialogar.

Pero incluso “las autoridades municipales estatales juntamente con el Subsecretario de Asuntos Religiosos (a cargo de Víctor Hugo González Zebadúa) saben de esta problemática pero no han intervenido en favor de los desplazados”, acusan.

Consideran que Roberto Pinto Kanter, exalcalde de Altamirano y actual candidato a la presidencia municipal de ese lugar es el “actor intelectual de estas agresiones y por encubrir a los líderes de San Miguel Chiptic para que intenten evadir a la justicia por sus hechos delictivos”.

Por esto hechos, responsabilizan a delegado de gobierno en la región, Juan Baldemar Navarro Guillén, el alcalde de Altamirano, Gerardo Aguilar Moreno, “por las agresiones, lesiones, atentados, amenazas demás agravantes que puedan sufrir los desplazados y sobre todo de la integridad física de los dos secuestrados por los líderes de San Miguel Chiptic”.

Exigen que se aplique la justicia para los afectados por la intolerancia religiosa y haya castigo para los agresores como “funcionarios y demás líderes políticos de la región que tanto daño han hecho”.