Tuxtla Gutiérrez, Chis. 6 Feb.- La Junta de Buen Gobierno ( JBG ) de Oventik, responsabilizó al Gobierno en sus tres niveles del conflicto por la disputa de 60 hectáreas entre el municipio de Aldama y la comunidad de Santa Martha, perteneciente a Chenalhó, que ha dejado 25 muertos y 14 heridos en los años recientes, porque “no ha solucionado de fondo las necesidades y problemas; su política es repartir dinero y migajas, crear conflictos y militarizar a las comunidades indígenas”.  

En un informe, con  videos testimonios de Bases de Apoyo Zapatista de Aldama y Santa Martha, señaló que “son muchas las comunidades afectadas directa e indirectamente porque ya no pueden transitar, trabajar, ni vivir libremente”, en esa zona. Además que “con la militarización en territorio zapatista nos están provocando y obligando a defendernos”. 

“Ya no se puede viajar en carro durante el día, sólo de noche con las luces apagadas. Y si tienen que trasladar enfermos y sus cargas, tirotean el carro. Se daña la unidad, la armonía, las buenas costumbres, los encuentros culturales y religiosos”, denuncian.

La Junta de Buen Gobierno de Oventik afirma que la problemática no es nueva, “en los años 70, mediante una resolución presidencial de José López Portillo le entregaron a Santa Martha (Manuel Utrilla), 60 hectáreas, que le pertenecían a Aldama, donde ahora está el municipio autónomo de Santa María Magdalena, como se reconoció años más tarde”.

“Luego hubo acuerdos internos para la devolución de 30 hectáreas, pero no se respetaron y con la remunicipalización de 1998, Aldama se convirtió en municipio oficial, como parte de “un plan contrainsurgente del mal gobierno de (Ernesto) Zedillo y del croketas (Roberto) Albores (gobernador de Chiapas), como respuesta a la declaración de municipios autónomos que hicimos los pueblos zapatistas en diciembre de 1994”.

Refirió que “en el mal gobierno de (Vicente) Fox y Pablo Salazar en el 2000, Santa Martha obtuvo su plano definitivo mediante el Programa de Certificación de Derechos Ejidales y Titulación de Solares Urbanos (Procede)”, por lo que los terrenos en disputa quedaron dentro de su territorio.

Después de 2008, el gobierno entregó diversas cantidades de dinero a las autoridades ejidales y de bienes comunales de Santa Martha y de Aldama. “Según el gobierno, el problema quedó resuelto, pero el conflicto siguió aumentando porque no hizo bien su trabajo de deslinde en los terrenos, ni abrió la brecha de los mojones, y con eso sembró más provocación”.

Luego con la implementación del Procede se acrecentó los conflictos por la disputa de tierras y Santa Martha y Aldama “son muestras de lo que trajo. El mal gobierno de por sí sabía cuáles eran sus intenciones al crear división y permitir que los campesinos tuvieran libertad, pero libertad de vender sus tierras”.

De acuerdo a la JBG, “se sabe que en esas tierras hay bellezas naturales y centros ceremoniales en donde pretenden crear reservas o centros ecoturísticos privados, por lo que con su política aprovechan para dividir y enfrentar comunidades para ver si caemos en sus trampas y ya cuando los pueblos se están enfrentando acusan que nos matamos entre hermanos y dicen que hay un conflicto intercomunitario, pero no dice quién lo creó. 

“Así justifican la militarización después de que ellos mismos metieron los problemas en territorio zapatista y nosotros les decimos: nos están provocando y nos están obligando a defendernos”.

En su informe, la JBG relata que en el sexenio pasado aumentó el conflicto, con “ataques contra todas las personas sin importar sexo y edades”, lo que “ha dejado viudas, viudos, huérfanos y huérfanas, casas y escuelas autónomas baleadas, animales domésticos muertos y desplazamientos; pérdida de maíz, café, plátano, quemas de caña y daños a la apicultura. Es claro que las afectaciones del conflicto son de ambos lados”.

“Ya en el período del presidente Andrés Manuel López Obrador y del gobernador Rutilio Escandón, así como de las respectivas autoridades municipales de Aldama y Chenalhó, hubo un enfrentamiento fuerte el 21 y 22 de enero pasado”.

Narra que esos dos días, las ráfagas se escuchaban en toda la franja del río que sirve de división entre los pueblos, y como solución el gobierno federal y estatal, así como de los alcaldes de Chenalhó, Abraham Cruz Gómez y de Aldama, Ignacio Pérez Girón, el 23 de enero enviaron camiones de soldados y policías para instalar una base de operaciones mixtas en la comunidad de Cocó, Aldama.

“El mal gobierno dijo a los partidistas que si no aceptaban a su guardia nacional les quitaría sus apoyos económicos. Es su costumbre de los malos gobiernos dejar preparado el terreno para que el que sigue repita las mismas chingaderas, pendejadas y cochinadas”, apuntó en su denuncia la Junta de Buen Gobierno de Oventik.  

Con videos testimonios de Bases de Apoyo Zapatista de Aldama y Santa Martha:

Queremos justicia inmediata: Bases Zapatistas de Santa Martha, Chenalhó.  https://bit.ly/2GeJKZp 

Mujeres de la comunidad de Xuxch’en en asedio por ataques armados.  https://bit.ly/2UKVXZ3 
Ataque a la comunidad de Kotsilnab: Denuncia de Base Zapatista  https://youtu.be/aQA_3-a_EKQ 

Bases Zapatistas responsabilizan al gobierno del conflicto en Aldama. https://youtu.be/aV6uiE8sLOQ 

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