Migrantes africanos y haitianos que llevan meses varados en la frontera sur por la política de contención del gobierno de México, volvieron a manifestarse en Tapachula, demandando visas humanitarias o que el Instituto Nacional de Migración (INM), les expidan algún documento que les permita transitar por territorio nacional.
Irineo Mújica Arzate, director de la agrupación Pueblos sin Fronteras, dijo que los migrantes exigen “que los dejen ir, que les den documentos; la gran mayoría quiere irse para Canadá y quieren pasar por Estados Unidos, y otros simplemente quieren salir a otros estados del país para trabajar, pero el Instituto Nacional de Migración (INM) no los dejan salir”.
La manifestación que inició en las instalaciones de la Estación Migratoria Siglo XXI, donde acampan desde hace 45 dias porque aseguran no tienen donde ir, finalizó en el parque central de la ciudad, frente a la presidencia municipal. Otro grupo protestó en las oficinas de Regularización Migratoria del INM.
Al frente iban niños y niñas que portaban cartulinas con las leyendas: “Somos niños, necesitamos escuela. danos vida” y “alto al racismo”.
Un tercer grupo de indocumentados centroamericanos marchó a las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), con la misma exigencia.
Mújica Arzate, dijo que “en Tapachula se están juntando más migrantes, muchos siguen entrando”, pero explicó que son mujeres y niños los que se van quedando en la ciudad, porque los que tienen dinero, se van yendo; “llegan y se van porque Migración les agiliza la entrega de documentos”, afirmó.
De acuerdo a estimaciones de los mismos migrantes y activistas hay unos 6 mil africanos, cubanos, haitianos y centroamericanos varados en la frontera con Guatemala desde hace seis, cuatro meses.
Paul Mananga, originario de la República de El Congo, lamentó que pese a que tienen dos meses protestando, no han tenido ninguna respuesta de las autoridades. “Acá no tienes derecho a nada y se están violando el derecho humano a emigrar”, dijo.