Columna Vertebral

Raúl Vera

¡Becarios si, sicarios no!
los programas sociales y la violencia en Chenalhó y Aldama

Ayer en conferencia de prensa el secretario de gobierno dio a conocer la inversión en programas sociales que el gobierno federal realiza Programas Sociales, en los municipios en conflicto de Chenalhó y Aldama:

“Adultos mayores, personas con discapacidad, seguro de vida para jefas de familia, apoyo para el bienestar para las niñas y los niños, jóvenes construyendo el futuro, Beca universal para el nivel medio superior, becas educativas para el bienestar, tandas para el bienestar, producción para el bienestar de pequeños y medianos productores, producción para el bienestar , producción para el bienestar de productores indígenas, productor para el bienestar para productores de café, la escuela es nuestra, crédito a la palabra, tandas COVID, universidades para el bienestar Benito Juárez y centros integradores de desarrollo, dan en total $ 134, 614, 887 millones en el municipio de Chenalhó. En el municipio de Aldama, $ 31,975, 210.”

En lo que va del sexenio el gobierno federal ha gastado un total de $ 166,590,097 millones de pesos en la aplicación de 17 programas sociales en los dos municipios en conflicto.

Chenalhó cuenta con 43, 453 habitantes, El municipio de Aldama 7 152, (Capitulo XXVI de Estadística de Población del gobierno del estado de Chiapas, 2020.) en total 50, 605 personas ejercen un presupuesto por programas sociales de $ 166,590,097. En una división per cápita nos da la fabulosa suma de $3,290,196 por habitante, obviamente el reparto de ese monto no se realiza a través de una simple división.

¿Esta inversión ha detenido la violencia? La respuesta es; no.

El día de antier el fuego cruzado se volvió a presentar y dio como resultado la muerte de Javier Jiménez Santis, de 30 años, poblador de Santa Martha, justo donde se ubican las 60 hectáreas en disputa.

Pero aun con todo ese monto no se ha podido resolver un problema añejo y que en vez de haberse apaciguado después de la firma de paz realizada el 31 de julio del presente año, sigue creciendo y amenaza con salirse de control, la sombra de Acteal se vuelve hacer presente, ya que el problema se focaliza en la misma región geográfica.

Ayer una docena de paramilitares del municipio de Chenalhó, cubriéndose el rostro con pasamontañas y que portaban armas largas, de uso exclusivo del ejercito, hicieron circular un video en donde declaran que a la fecha van 20 muertos y dos presos desde septiembre del 2019, del lado de Chenalhó, y aclaran que el conflicto no se va solucionar por vía política sino de manera legal, con justicia y equidad.

“Como ya se ha dicho en repetidas ocasiones, Aldama y Santa Martha, están enfrentados desde hace 45 años por la disputa de 60 hectáreas. ¡60 hectáreas! El pleito se agravó con la remunicipalización de 1998 y la creación de Aldama como municipio libre, aunque finalmente todos son pedranos de origen (San Pedro es el patrono de Chenalhó) o lo que es lo mismo todos beben del mismo pozo (Chenalhó significa pozo de agua. Los ataques y agresiones son mutuos. El resultado es que de Santa Martha hay 20 muertos y 16 lesionados, y de Aldama cinco muertos y un número no precisado de heridos”. (Elio Enríquez, corresponsal de la Jornada).

Tal parece que de nada han servido las 70 reuniones que la Secretaría de Gobierno ha encabezado, ni los $ 166,590,097 millones invertidos en los 17 programas sociales.

Lo que hace evidente que para desactivar el conflicto se tiene que intervenir de fondo: desarmar a los grupos paramilitares de ambos lados, (recordemos que Chenalhó mantiene otro frente de guerra en su colindancia con Chalchihuitán, también por problemas limítrofes) y establecer el estado de derecho; el gobierno del estado tiene que pasar de ser administrador del conflicto, (rol que ha jugado en los últimos dos sexenios), a solucionar de fondo un problema que sigue escalando en una zona que desde 1997 vive bajo la sombra de la masacre de Acteal, y hacer valer la máxima: Becarios si, Sicarios no…