Normalistas afirman que mantendrán su exigencia para que el gobierno cumpla sus demandas

Gobierno declara que no cederá a chantajes

Estudiantes de la Escuela Normal Rural Mactumactzá manifestaron que mantendrán su exigencia de exigir construcción y reapertura del internado, aumento al presupuesto de la institución, así como que no se recorte las matriculas escolares, hasta que el gobierno cumpla sus demandas por lo que no se retirarán del movimiento tras el desalojo con gases de la noche del viernes.

Lo anterior, lo señalaron durante una marcha la noche de este sábado que culminó afuera del Palacio de Gobierno, donde participaron unas 300 personas, entre ellos, indigenas tzotziles desplazados del ejido Puebla municipio de Chenalhó. Los normalistas insistieron en la apertura del internado de Mactumactzá que fue cerrado hace hace más de 15 años por el gobierno de Pablo Salazar Mendiguchía.

 

Los normalistas piden, que se mantenga la matrícula para ingreso de nuevos estudiantes, contratación de personal docente, administrativo y manual, y que no haya recortes al presupuesto de las escuelas de educación normal en el país.

Luego de que fueran desalojados la noche de este viernes con gases lacrimógenos, donde bloquearon las entradas y salidas del Palacio de Gobierno impidiendo que pudieran salir, decenas de funcionarios de diferentes dependencias, empleados del gobierno federal, estatal y ciudadanos que habían llegado a realizar algún trámite.

La Sección 7 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), adherida a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), condenó “la represión” policiaca que dijo, fueron víctimas estudiantes de la Escuela Rural Normal Mactumatzá y desplazados de Chenalhó que habían bloqueado las entradas y salidas del palacio de gobierno.

“Los únicos delitos de los estudiantes son ser pobres, indígenas, hijos de campesinos y, sobre todo, levantar la voz contra los tiranos para exigir lo que por ley les pertenece”, señaló en un comunicado.

Manifestó que “las demandas que han orillado a los estudiantes a salir a las calles ante la política de oídos sordos del gobierno estatal, son la construcción y reapertura del sistema de internado, aumento al presupuesto de la institución, no al recorte de las matrículas escolares, contratación de personal docente, administrativo y manual”.

El gobierno estatal por su parte, afirmó que “no caerá en actos de corrupción para satisfacer chantajes de jóvenes que se disfrazan de estudiantes, pero en la práctica actúan como viles delincuentes”.

“Nada por la fuerza ni por la vía de la ilegalidad, mucho menos cuando se comportan como delincuentes y ponen en peligro la integridad de la población», al tiempo de expresar que “por más de 8 horas, estudiantes mantuvieron retenidos a alrededor de 400 trabajadores de Palacio de Gobierno, así como a quienes se encontraban realizando algún trámite en el interior, a pesar de las múltiples mesas de diálogo que ha generado este gobierno para atender las legítimas demandas”.

Durante una marcha, en la que participaron unas 300 personas, los normalistas reiteraron la tarde de este sábado, que seguirán exigiendo que se cumplan sus demandas. “No nos vamos a retirar de este movimiento por la represión” del viernes que dejó “tres alumnos hospitalizados”.

El Congreso local, por su parte, respaldó “las acciones implementadas por el gobierno del estado en defensa de los derechos de la ciudadanía que permanecía retenida por alumnos de la Escuela Mactumactzá”.

“El bienestar de la sociedad está por encima de los intereses particulares de quienes le apuestan a la violencia como método de presión para obtener beneficios”, al tiempo que llamó a los estudiantes “a ponderar el diálogo y la conciliación como la única medida para llegar a acuerdos”, manifestó en un comunicado.