Anayeli García Martínez.- CIMACNoticias
Ciudad de México. Las diputadas federales Wendy Briceño Zuloaga y Marta Dekker Gómez, así como la legisladora con licencia, Guadalupe Almaguer Pardo, se sumaron a la exigencia de madres de víctimas de feminicidio en Chiapas para que las autoridades estatales escuchen sus casos y les garanticen justicia y un trato respetuoso.
Este 9 de marzo las legisladoras recibieron a Adriana Gómez Martínez, madre de Jade Guadalupe Yuing Gómez, una niña de 13 años de edad que murió el 14 de enero de 2020, supuestamente porque se suicidó; y a Maricruz Velasco Nájera y Manuel Gómez Girón, padres de Karla Yesenia Gómez Velázco, asesinada el 4 de julio de 2018.
Estas familias viajaron durante cuatro días desde Chiapas, donde radican, hasta la Ciudad de México para solicitar una reunión con el presidente Andrés Manuel López Obrador y exponerle sus casos. El 4 de marzo instalaron un plantón en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México y la madrugada del viernes 5 permanecieron afuera de Palacio Nacional, en espera de ver al mandatario. Sin embargo, ni siquiera pudieron acercarse a la puerta por donde se ingresa al recinto, debido al cerco de vallas. El lunes 8 de marzo volvieron a intentar acercarse durante la conferencia mañanera del presidente, tampoco lo lograron.
Las madres, acompañadas de la defensora Irinea Buendía Cortés, cuya hija, Mariana Lima, fue asesinada en 2010, consiguieron una reunión con las legisladoras, a quienes les detallaron que las investigaciones de los asesinatos de sus hijas han sido irregulares: en un caso el crimen se trató como suicidio y en otro como homicidio con agravantes.
La presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, de la Cámara de Diputados, Wendy Briseño señaló: “Exigimos al gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón, que se solidarice con las víctimas, que se ponga orden en lo que está pasando en el estado. Son tremendos los feminicidios. El tratamiento es totalmente inadecuado”.
La diputada por Morena dijo que la Fiscalía ha sido omisa en estos casos, por ello pidió que se dé un trato respetuoso y adecuado a las familias de las víctimas, quienes ya cumplieron una semana en la capital del país. En su camino a la Ciudad de México las madres y padre pasaron por Oaxaca y Puebla, donde la policía los agredió por desplegar lonas con los nombres y fotos de sus hijas.
Maricruz Velasco Nájera, madre de Karla Yesenia, aseguró que no son parte de ningún colectivo feminista, por eso pidió una reunión con el gobernador del estado y con López Obrador: “No estamos pidiendo favor, estamos exigiendo justicia. Me dirijo a nuestro presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que por favor nos volte a ver, a nosotras, a las familias”.
Manuel Gómez Girón aseguró que hay un detenido por el feminicidio de su hija, pero se debe garantizar una sanción ejemplar, para ello emprenderán las caminatas que sean necesarias a pesar de que “cada paso que damos como madres y padres de víctimas de feminicidio no es más que hablar del dolor que traemos, expresar cómo es que asesinaron a nuestras hijas, cómo están las carpetas de investigación”.
Adriana Gómez Martínez expuso que su hija Jade Guadalupe practicaba judo de alto rendimiento en el Instituto del Deporte de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, donde fue asesinada. Señaló que en la carpeta de investigación hay diversas irregularidades, por eso pidió la destitución de Tania Robles, directora de dicho instituto, quien ha obstruido la justicia. “Lo único que pidió como madre es justicia para mi hija”.
Irinea Buendía Cortés, madre de Mariana Lima Buendía, asesinada hace más de 10 años, recordó que el caso de su hija, que en un primer momento se trató como suicidio, fue precedente porque el 25 de marzo de 2015 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) sentó jurisprudencia al emitir la llamada sentencia Mariana Lima Buendía.
El agresor de Mariana fue detenido en 2016, pero aún no ha sido sentenciado debido a que el proceso en su contra se retrasó debido a la pandemia de COVID-19. Irinea Buendía explicó que en Chiapas sucede lo mismo que en el Estado de México. En el sur del país, dijo, sólo hay seguridad de que asesinen a las hijas de las chiapanecas.
La diputada por Chiapas, Dekker Gómez, hizo un enérgico llamado a la actual Fiscal General del Estado, Olaf Gómez Hernández, para que se atiendan los casos de feminicidio como debe de ser. En el caso de la niña, agregó, hay indicios de violencia física que no se han tomado en cuenta. “Se debe de investigar bajo el protocolo de feminicidio, no podemos decir que son homicidios, ya que las condenas son totalmente distintas”.