Fredy Martín Pérez.
Los 80 trabajadores del rastro municipal de Cintalapa, convirtieron los pasillos de la alcaldía de ese lugar, en un rastro, en protesta porque el alcalde Francisco Nava Clemente, no ha cumplido con la modernización del frigorífico que en los últimos tres años labora en condiciones insalubres, denunciaron.
Esta tarde, los trabajadores del rastro llegaron hasta la alcaldía en varios camiones donde trasladaban reses, para pedirle Nava Clemente, que en el 2018 ganó la alcaldía postulado por el PVEM, cumpla con la modernización del rastro.
Un vocero de los trabajadores aseguró que en estos tres años, han trabajado en condiciones insalubres, por lo que se cansaron de esperar que el presidente municipal cumpla con su palabra, por eso llegaron hasta donde despacha donde sacrificaron una res.
Con un mazo, los empleados del rastro mataron la res, para luego destazarla en los pasillos, en medio de charcos de sangre que llegaron hasta las oficinas del ayuntamiento.
Los trabajadores dijeron, que si Nava Clemente no cumple con su palabra, entonces este jueves volverán a sacrificar otra res en los pasillos de la presidencia municipal.
Señalaron que el alcalde se comprometió a comprar una sierra para el frigorífico, pero faltan 50 días para que termine su administración y aun siguen esperando, aunado a que no les da botas, ni utensilios para laborar, por lo que la carne se contamina al caer al suelo.
En el rastro municipal de Cintalapa, municipio colindante con Oaxaca, son sacrificados entre 8 a 12 reses al día.
Hasta esta tarde el alcalde no ha dado cumplimiento a las demandas de los trabajadores del rastro municipal, por lo que se prevé que regresen a sacrificar otra res este jueves.