La Sección 7 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), afirmó que a pesar de que el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó públicamente que sea la secretaria de Educación Pública Delfina Gómez Alvarez, la que atienda sus demandas, “hasta hoy no hemos tenido éxito en que nos tome las llamadas o nos resuelva para sentarnos en una mesa y poder desahogar nuestras” peticiones.
“Hemos estado insistiendo permanentemente y hasta hoy no tenemos respuesta alguna”, dijo en conferencia de prensa el secretario general, Pedro Gómez Bahamaca, al reiterar que “el movimiento magisterial y popular de Chiapas sigue mantenido su voluntad de diálogo”.
En su reaparición pública después de padecer Covid-19, indicó que la CNTE, “sigue haciendo su oficio político para insistir en el diálogo con el presidente, para hacerle entender por las distintas formas que no es un pleito que traemos cazado con el ejecutivo, sino que lo que queremos es que nos atiendan”.
“Ante la política dura de cerrazón que aplican al movimiento magisterial y popular de Chiapas, les decimos que vamos a seguir manteniendo nuestros reclamos y seguiremos saliendo a las calles”.
Este viernes explicó que el movimiento magisterial revisará y evaluará en asamblea las acciones a realizar los próximos días para seguir exigiendo solución a sus demandas. “Mantenemos la consigna de que se cumpla la bilateralidad, mientras no se cumpla nos seguirán viendo en las calles”, advirtió.
Gómez Bahamaca señaló que “en esta administración se acentúa la falta de voluntad del gobierno, porque la bilateralidad que tanto hemos reclamado fue desapareciendo hasta llegar a las consecuencias de que se emiten convocatorias unilaterales para todos los procesos, dañando el derecho de los trabajadores a través de la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (Usicamm)”.
“Hoy seguimos demandando la abrogación total de la mal llamada reforma educativa que en el régimen laboral deja en posiciones precarias a los trabajadores de la educación”.