Los inconformes exigen una auditoría al edil Roberto Pinto Kanter, quien le heredará el cargo a su esposa
Los tres accesos principales a la cabecera municipal de Altamirano, bloquearon este miércoles habitantes de la localidad, para tratar de impedir la toma de posesión de la alcaldesa electa, Gabriela Roque Tipacamú, quien sucederá a su esposo, Roberto Pinto Kánter, ambos del Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
El cierre de las tres entradas y salidas comenzó a las 6 de la mañana, y cada 6 horas los manifestantes abren el paso para que entren y salgan los vehículos, y cuando se presenta alguna emergencia como el traslado de enfermos le dan paso, informó Gabriel Montoya Oseguera, uno de los diez integrantes de la mesa directiva nombrada la semana pasada por los inconformes.
Explicó que la exigencia de ejidatarios, sus hijos, avecindados y demás pobladores es que se conforme un concejo municipal, y que se realice una auditoría a la administración que concluirá este 30 de septiembre de los recursos federales y estatales.
Indicó que en Altamirano “existe un ambiente de tensión y temor porque la gente pudiera ser agredida por los grupos de choque afines al ayuntamiento; hay un riesgo latente de que quieran confrontar” a los inconformes.
Comentó que desde que inició su administración hace tres años, Pinto Kánter despachó en su casa particular ubicada a cuadra y media del palacio municipal, incendiado la noche del 15 de septiembre, durante la ceremonia del Grito de Independencia.