Dayli “N” es señalado por los Autodefensas El Machete de encabezar un grupo de sicarios en Pantelhó
Agentes de la Policía Especializada, detuvieron a Dayli de los Santos Herrera Gutiérrez, por su presunta responsabilidad en la autoría intelectual del asesinato del fiscal de Justicia Indígena, Gregorio Gómez Pérez, acribillado a balazos el 10 de agosto en San Cristóbal de las Casas, en el contexto del conflicto en Pantelhó, informó la Fiscalía General del Estado (FGE).
Es el segundo detenido por el homicidio de Gómez Pérez. El pasado 24 de agosto la Fiscalía ejecutó una orden de aprehensión en contra de Carlos Albino «N”, a quien identifica como uno de los presuntos coautores materiales del crimen.
Herrera Gutiérrez ha sido acusado por el grupo de Autodefensas del Pueblo “El Machete” y por pobladores de Pantelhó, de ser uno de los presuntos sicarios que operan en el municipio.
Es hijo de Austreberto Herrera Abarca, presunto creador del grupo que hasta antes del 7 de julio controlaba el municipio, preso desde el 31 de julio de 2019 y vinculado a proceso en tres causas penales.
La FGE señaló en un comunicado que el acusado fue detenido en el ejido Independencia, municipio de La Concordia y “al ser notificado de la orden de aprehensión, portaba en mano un arma de fuego calibre 9 milímetros, que intentó accionar en contra de los elementos de la Policía Especializada”.
Dijo que Herrera Gutiérrez será puesto a disposición del órgano jurisdiccional correspondiente, para que se determine su situación jurídica en las próximas horas, mientras que el arma fue asegurada por la policía.
La FGE precisó que la orden de aprehensión fue obsequiada por el Juez de Control y Enjuiciamiento de los Distritos Judiciales de San Cristóbal y Bochil y ejecutada a través de la Fiscalía Contra Homicidio y Feminicidio.
El Fiscal Gómez Pérez, quien realizaba diversas investigaciones en el municipio de Pantlehó, donde el 7 de julio irrumpió el grupo de Autodefensas del Pueblo El Machete para “sacar a los sicarios” que operaban en ese lugar, fue asesinado a balazos la noche del 10 de agosto -un día después de que se conformara un concejo municipal por medio del sistema de usos y costumbres-, a dos cuadras de su oficina en San Cristóbal de las Casas.