Un grupo de 44 migrantes que participaron este viernes en una caravana que fue desintegrada por agentes de la Guardia Nacional y del Instituto Nacional de Migración (INM), se cocieron los labios con aguja y hilos, lo que les impide consumir alimentos, para presionar a las autoridades les emitan documentos que les permita transitar por territorio mexicano.
“Desde ayer y en el transcurso de este sábado, 44 compañeros están en resistencia civil pacífica, decidieron suturarse los labios y se mantienen en ayuno voluntario por tiempo indefinido”, informó el activista Luis García Villagrán, del Centro de Dignificación Humana.
La protesta se lleva a cabo en una cancha de la comunidad Alvaro Obregón a 18 kilómetros de Tapachula, donde de acuerdo al defensor, 700 extranjeros que participaron en la caravana que partió la víspera descansan, después de haberse enfrentado en dos ocasiones con agentes antidisturbios.
Explicó que se trata de una protesta debido “a la violencia de que fuimos víctimas todos; el viernes cuando íbamos en caravana, se cayó en actos vergonzoso de parte de la autoridad, pero ya no queremos crispar más el asunto, sólo estamos llamando a través de actos de resistencia civil pacífica a la opinión pública para que sea ésta la que presione a la autoridad y nos resuelva lo más pronto posible, porque por eso los compañeros están haciendo actos extremos”.
Señaló que los migrantes de distintas nacionalidades, van a seguir manteniéndose en ayuno voluntario indefinido hasta que se resuelva la situación de todos que somos 700 personas”.
Aseguró que cada dos horas se están sumando dos personas a la huelga. Están resueltos a llegar hasta las últimas consecuencias de manera pacífica, hasta que resuelvan la situación migratoria de todos los que estamos aquí. Somos ciudadanos, gente, latinoamericanos que lo único que pedimos es que se aplique la ley de migración”.
Dijo que los migrantes están llamando al diálogo a la delegada del Instituto Nacional de Migración (INM) en Chiapas, Paola López Rodas “que nos reciba la llamada para resolver la situación”.
“Iniciamos esta huelga de hambre, porque necesitamos libre tránsito para todos los migrantes. No queremos más problemas ni violencia, sólo el libre tránsito y que nos den nuestra visa para avanzar a la frontera”,dijo Erick Camacho, de Venezuela.
Su compatriota, Francisco Montoya, expresó que “esto se está haciendo para que todas las autoridades sepan que se está realizando de manera pacífica , no hemos golpeado a nadie, no hemos quemado ningún carro ni partido un sólo vidrio, estamos todavía con una conducta intachable, aporreados por la paliza que nos dieron el viernes, pero estamos en resistencia con la boca cosida, no podemos comer”