El informe de fondo ya está enlistado en la CIDH, por o que en cualquier momento se emitirá y finalmente el Estado mexicano responderá por ese crimen cometido en Acteal: Las Abejas

San Cristóbal de las Casas, Chis. 21 Dic.- Al conmemorar este jueves, un cuarto de siglo de la masacre de 45 indígenas tsotsiles de Acteal, la Organización Sociedad Civil Las Abejas, dijo que los 25 años de impunidad, no sólo han generado un sinfín de conflictos, han traído tristeza y descomposición del tejido social y comunitario de Chenalhó, sino que “han causado violencias inimaginables en todo México”, por lo que “ya no sólo podemos decir que el sistema de justicia mexicano está podrido, sino que va de mal en peor”.

“Han pasado 25 años de la masacre de Acteal y a la fecha ese crimen de Estado sigue impune, como lo hemos venido denunciando mes con mes durante un cuarto de siglo y aunque los gobiernos sean priístas, panistas o morenistas en vez de aplicar la justicia han creado estrategias y políticas de desgaste hacia nuestra organización”, señalaron en un pronunciamiento.

Como cada año, decenas integrantes de Las Abejas, a la que pertenecían las víctimas, familiares, amigos y personas solidarias, realizaron una peregrinación desde el crucero de Majomut, y luego de caminar unos kilómetros llegaron a la comunidad de Acteal, donde están sepultados los 45 indígenas.

Antes de que el obispo auxiliar de la diócesis de San Cristóbal de las Casas, Luis Manuel López Alfaro oficiara la misa para recordar a las víctimas, Las Abejas denunciaron que “de las estrategias y políticas de desgaste, podemos señalar que el gobierno del panista Felipe Calderón permitió a la mal llamada Corte de Justicia de la Nación liberar a los paramilitares, autores de la masacre. Liberó masivamente a los responsables el 12 de agosto de 2009”.

La intención de este hecho, manifestaron: “fue encubrir a los autores intelectuales como Ernesto Zedillo Ponce de León, Emilio Chuayffet y Julio César Ruiz Ferro”, expresidente, exsecretario de Gobernación y ex gobernador de Chiapas, respectivamente, así como a los generales Enrique Cervantes Aguirre y Mario Renán Castillo”, exsecretario de la Defensa Nacional y excomandante de la Séptima Región Militar, entre otros.

“La otra estrategia del Estado ha sido la dilación de la justicia que ha provocado dos divisiones de nuestra organización. La primera en 2008 y la segunda en 2014. Con esas divisiones ha buscado debilitarnos para que abandonemos nuestra lucha no violenta, pero el gobierno y sus cómplices ignoran y olvidan nuestra terquedad y tenacidad que se han vuelto una virtud para resistir y buscar una vida digna”.

Las Abejas refirieron que “desde 2005, cuando vimos que el sistema de justicia mexicano no tenía capacidad ni voluntad política para castigar a los autores intelectuales y materiales de la masacre, decidimos acudir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que el Estado mexicano reconozca que es un crimen de Estado y los responsables sean investigados y castigados”.

Revelaron que la CIDH les ha informado que el informe de fondo ya está enlistado, por o que en cualquier momento se emitirá y finalmente el Estado mexicano responderá por ese crimen cometido en Acteal.

Sobre la matanza de Acteal, “el actual gobierno federal ha mantenido el silencio y abiertamente negado ante la CIDH el involucramiento de autoridades mexicanas en acciones de contrainsurgencia durante los años noventa en Chiapas, y ha excluido conscientemente este periodo del proceso de estudio de la Comisión de la Verdad para la guerra sucia en México”, señaló por su parte el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba)

El Frayba dijo que “la falsedad y los pactos de impunidad son una agresión que mantiene la herida abierta de la masacre ocurrida el 22 diciembre de 1997, que revictimiza y profundiza el dolor colectivo. En medio de la protección de las élites política y militar, cualquier acción publicitada como reparación integral y justicia transicional son una absoluta simulación”.

El Centro de Derechos Humanos, destacó que es inspirador observar cómo la organización Las Abejas “construye en lo cotidiano una isla de paz y esperanza, un refugio frente a la tempestad que envuelve la región de los Altos de Chiapas, donde las balas caen como gotas permanentes y la fractura social se ensancha en medio de la colusión e inacción de los gobiernos”.

“Por más lejano que sea este rincón llamado casa de la memoria y esperanza, el eco de sus voces recorre Chiapas, México y el mundo, y pese a los intentos del Estado mexicano por negar su responsabilidad, su palabra constante ha sido firme en escribir la historia de la masacre de Acteal que tiñó de rojo al país hace 25 años, y aunque no se haya pronunciado condena alguna contra aquellos que la planearon, conocemos los nombres de cada autoridad responsable: Ernesto Zedillo, Emilio Chuayffet, Cesar Ruiz Ferro, entre otros tantos sentenciados por el no olvido”.

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