Fuerzas de seguridad toman el control de la zona norte
Este martes, fuerzas de seguridad de los tres niveles de gobierno tomaron el control de la zona norte de San Cristóbal de las Casas, luego de la jornada violenta del lunes, cuando fueron asesinados, el dirigente de artesanos, Gerónimo Ruiz López, dos jóvenes más y tres casas quemadas; la situación comenzó a normalizarse en la ciudad.
A lo largo de más de un kilómetro sobre el periférico nororiente, entre las colonias Ojo de Agua y Peje de Oro, los militares y policías instalaron retenes, por lo que los lugareños comenzaron a realizar sus actividades normales.
Mientras en la colonia Nueva Esperanza, era velado Gerónimo Ruiz, quien pertenecía a la Asociación de Locatarios de Mercados Tradicionales de Chiapas (Almetrach), que lidera su primo Narciso Ruiz.
A la orilla de la carretera que conduce a la parte alta del cerro, donde se ubica el ejido El Pinar y hacia donde los seguidores de Gerónimo apuntaban sus armas el lunes, se observó un vehículo tipo Jetta blanco volcado.
Durante un recorrido por la zona norte, epicentro de la tensión, se apostaron al menos 100 elementos de las fuerzas de seguridad, entre agentes de la Guardia Nacional, soldados del Ejército Mexicano y de las policías estatal y municipal, que desde las 19 horas del lunes tomaron el control de la zona.
Más arriba, ya casi en la colindancia con el municipio de Chamula, la indígena Marta López Hernández mostró cómo quedó su casa que fue incendiada por seguidores de Ruiz López.
“Entraron los hombres, quemaron toda la ropa, sólo me dejaron lo que tenía puesto. Nada quedó. No sé de dónde vino la gente y quemó todo. Sin ropa me quedé. Yo no maté al Gerónimo, no sé por qué me hicieron esto”, dijo llorando.
Agregó que su vivienda, “vino un montón de gente y se llevaron tres motocicletas de mis hijos y 200 mil pesos”, producto de la venta de productos de su tienda de abarrotes.
“Se llevaron también la televisión, el colchón, todo, y quemaron otra casa de la parte de abajo”.
Laura, otra de las mujeres a las que le quemaron su vivienda, comentó: “Me dejaron en la calle porque además me robaron 200 mil pesos. Aquí estaba cuando vino la gente. Me amenazaron y golpearon con sus armas. Quemaron todas mis cosas. Todo”.
Mariano Díaz Ochoa aseguró que la violencia se desencadenó porque la Almetrach, “trató de hacer justicia por su propia mano por el asesinato de Gerónimo Ruiz”.
“Mucha gente se pregunta por qué tarda la policía en llegar y accionar. Porque hay protocolos y es complicado, hay muchos jovencitos que están drogados y tomados que no les importa, son arrebatados, se avientan. Son 10 o 20 los que están armados disparando, pero todos los demás están desarmados. Si la policía entra estaríamos lamentando las consecuencias”.
Reconoció que el lunes por la tarde en que hubo disparos de armas de fuego al aire, quema de casas y bloqueos en la zona del Ojo de Agua, “sí hubo miedo y temor, pero vamos a seguir trabajando para dignificar al municipio”.
La mayoría de escuelas, sobre todo las que se ubican en la zona norte de a ciudad, suspendieron labores este martes.