Se estima que en el municipio hay 95 mil 246 madres potenciales; quienes acudan a la institución a solicitar servicios, podrán hacer uso del espacio.
La alcaldesa Rosy Urbina Castañeda dijo que la sala es una muestra de empatía con las madres; el ayuntamiento de Tapachula está ocupado en atender las necesidades de las mujeres que son mayoría.
Históricamente, las mujeres han enfrentado discriminación y desigualdad que les han impedido tener tanta presencia en el mercado laboral como la de los hombres.
En consecuencia, la OIT ha buscado nivelar el terreno a través de diferentes acciones y estándares internacionales.
Tapachula, Chis.- Rosy Urbina Castañeda, alcaldesa de Tapachula y Gabriela Márquez, coordinadora del proyecto Compartir Responsabilidades de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), inauguraron una sala de lactancia en beneficio de madres trabajadoras y usuarias del Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) financiado por Nestlé.
«Es una muestra de empatía con las madres; el ayuntamiento de Tapachula está ocupado en atender las necesidades de las mujeres que son la mayoría”, dijo la presidenta municipal Urbina Castañeda.
La alcaldesa aseguró que su administración tiene la sensibilidad para fomentar la inclusión y atención de los sectores más vulnerables en la institución, como pueden ser las madres solteras, quienes enfrentan la complejidad del cuidado de sus hijas e hijos.
El nuevo servicio explicó Gabriela Márquez, permitirá que las mujeres concilien su trabajo remunerado con las labores de cuidados no remunerados, sin que esto impacte negativamente en su desarrollo profesional. Además, el espacio contribuirá con la protección de la maternidad en el municipio y la promoción de la lactancia materna.
“Estas medidas son fundamentales para que las mujeres permanezcan en el mercado laboral, pues les ofrece un espacio cómodo y privado para la lactancia directa, cuando es posible, o para extraer la leche materna; tienen asientos, acceso a frigoríficos o neveras para guardar la leche, así como un entorno limpio y seguro que no sea el cuarto de baño”, manifestó.
La creación de esta sala de lactancia está en sintonía con las normas internacionales de trabajo de la OIT. Entre ellas se encuentra el Convenio sobre la protección de la maternidad, 2000 (núm. 183), que establece que las trabajadoras tienen derecho a una o varias interrupciones por día para la lactancia, que sean contabilizadas como tiempo de trabajo y remuneradas en consecuencia.
Por otra parte, en Chiapas, la Ley de Servicio Civil del Estado y los Municipios estipula que las mujeres trabajadoras pueden acceder a dos descansos extraordinarios por día, de media hora cada uno por un periodo de seis meses, a partir del día siguiente del parto.
Gabriela Márquez reiteró que la intervención forma parte del proyecto Compartir Responsabilidades: Fortalecimiento de los sistemas de protección social para el mejor cuidado de las hijas e hijos, financiado por Nestlé con la asistencia técnica de la OIT.
El objetivo central de la iniciativa es promover la conciliación entre la vida laboral y familiar a través de tres ejes de acción:
- Incrementar la base de conocimientos sobre las licencias parentales existentes en México.
- Crear un espacio de diálogo social tripartita y permanente sobre el tema que integra a organismos de la sociedad civil.
- Contribuir a la formulación de un marco de política pública para las y los trabajadores con responsabilidades familiares.
“En Nestlé estamos convencidos de impulsar mecanismos institucionales que garanticen las condiciones para que las madres puedan amamantar a sus bebés; particularmente la instalación de salas de lactancia dignas en espacios públicos y laborales. Nuestras operaciones en el país promuevenacciones, iniciativas y trabajo con las esferas públicas, académicas, científicas y de la sociedad civil que contribuyan a la salud, nutrición y bienestar de todos” destacó Juan Carlos Pardo, Director de Asuntos Corporativos y Creación de Valor Compartido de Nestlé México.