San Cristóbal de Las Casas, Chis. 5 Marzo.- Cientos de familias tseltales organizadas en el Frente por la Lucha Popular 29 de febrero del municipio de Huixtán que están en resistencia de pago desde hace 20 años contra la Comisión Federal de Electricidad, pidieron a la presidenta de la república, haga valer el principio “por el bien de todos, primero los pobres”, y se les condone la deuda que tienen.
“Demandamos borrón y cuenta nueva, con la esperanza de que el gobierno que inició Andrés Manuel López Obrador y continuó Claudia Sheinbaum Pardo se haga valer el principio, velando siempre por el bienestar de los más necesitados con el fin de acercarse a la equidad e igualdad social de todos los mexicanos”, dice la carta de los inconformes enviada a presidencia.
En el escrito enviado también a otras autoridades, los pobladores denuncian: “casi todos los recibos que llegan a las comunidades de alta marginación que cuentan con 2 o 3 focos, las cantidades oscilan entre 325 y 126 pesos por familia, por lo que a simple vista se puede ver que los usuarios no pueden tener los mismos consumos, pero lo peor es que existen otros casos en los que los recibos llegan con cantidades de 2 mil y 3 mil pesos por cada hogar”.
Los tseltales exigen que se establezca “una tarifa justa y fija de la energía eléctrica para los pueblos más marginados y olvidados de México” y que sean “cancelados totalmente los subsidios a las grandes empresas trasnacionales”.
El dirigente de la agrupación, Guillermo Vásquez, aseguró que la CFE “ha venido agudizando sus prácticas de abusos y atropellos en contra del pueblo marginado de México, ya que “desde el escritorio está haciendo cálculos arbitrarios y exagerados, los costos están hechos al puro tanteo”.
Al conmemorar el 22 aniversario de la conformación del movimiento por los “altos e injustificados cobros” por el consumo de energía eléctrica, el Frente denunció que “las líneas de conducción y de distribución del tramo de Huixtán al vecino municipio de Oxchuc se encuentran en total deterioro y abandono” por la CFE.
En su solicitud a la presidenta de la república, le piden que impulse “iniciativas que permitan la distribución equitativa y justa de la riqueza nacional, comenzando con el suministro de la energía eléctrica como un derecho humano, ya que solamente de esta forma pueden llegar los beneficios a los mexicanos más vulnerables de la sociedad”.
Agregan: “Como pueblo de Huixtán que nos encontramos en una zona de alta marginación, confiamos y solicitamos respetuosamente al gobierno federal y estatal de la cuarta transformación, que la energía eléctrica sea decretada y considerada como un derecho humano para el pueblo de México”.