Mujeres Tsotsiles, tzeltales y choles marcharon para exigir “alto a la violencia a las mujeres en todas sus formas”

Tuxtla Gutiérrez, Chis. 8 Marzo.- En el Día Internacional de la Mujer, cuando miles salen a las calles para cuestionar a la sociedad, mujeres tsotsiles integrantes de la Organización Sociedad Civil Las Abejas marcharon en el municipio de Chenalhó para exigir “alto a la violencia hacia las mujeres en todas sus formas, especialmente la provocada por el alcohol y las drogas en nuestras comunidades”.

En el municipio tseltal de Oxchuc, por primera vez cientos de mujeres salieron a las calles para gritar consignas contra el patriarcado y a la violencia machista. Mientras que en Chilón, localidad de la etnia Chol, las mujeres de la misión de Bachajón reflexionaron sobre la situación de las mujeres y sus derechos también a la tenencia de la tierra.

En Chenalhó, la manifestación en la que participaron más de 400 mujeres, acompañadas por varones, partió del crucero de la comunidad de Majomut hacia Acteal, donde el 22 de diciembre de 1997 fueron masacrados por paramilitares, 45 tsotsiles, la mayoría mujeres, niñas y niños.

“Alto a los desplazamientos forzados que mayormente viven las mujeres y sus hijos por la violencia de los grupos armados y al saqueo de los recursos de nuestra madre tierra; respeto a su derecho a la tierra y desarme total a los grupos armados”, manifestaron Las Abejas que señalaron decidieron marchar para “juntar nuestras voces para denunciar la violencia que estamos viviendo actualmente en nuestras comunidades”.

Al llegar a Acteal, dieron a conocer un pronunciamiento en el que denunciaron que “el crimen organizado ha venido en aumento desde hace 4 años” y que ante las denuncias que han realizado, el gobierno “siempre ha hecho sordos sus oídos tratando de maquillar con su ‘servicios sociales’ mandando a su Ejército, Guardia Nacional y actualmente los Pakales (Fuerza de Reacción Inmediata Pakal), que lo único que han hecho es venir a rescatar carros robados, en lugar de capturar delincuentes que han privado de la vida a muchas y muchos inocentes”.

“Tal parece que eso no es prioridad para los tres niveles de gobierno porque hasta ahorita siguen los grupos armados en varias comunidades, como nos hemos percatado muchas mujeres, y lo peor de todo es que caminan armados enfrente de los militares sin que eso tenga ninguna consecuencia”.

Afirmaron que “el alcoholismo y la drogadicción que impera en nuestros pueblos, hace que los hombres pierdan la cabeza como sucede con la mayoría y hace muy difícil nuestra vida y la de todas las mujeres, que generalmente somos golpeadas y maltratadas; mientras los hombres gastan el dinero de la familia las mujeres y los niños encuentran enfermedades”.

“Conocemos que las mujeres tenemos derecho a ser respetadas, pero desde chiquitas nos enseñan que somos menos, que los hombres valen más”, expresaron las mujeres tsotsiles.

En Chiapas, miles de mujeres salieron a las calles en por lo menos siete ciudades de la entidad, para denunciar la violencia de género, los feminicidios y la desaparición de jóvenes.

Las mujeres del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba), por su parte, reivindicaron y honraron “las luchas y las resistencias de todas las mujeres, adolescentes y niñas”

“Reivindicamos las luchas históricas y las actuales que se tejen desde nuestras identidades y nos fortalecen para enfrentar el sistema depredador capitalista y patriarcal que violenta los territorios y los cuerpos de niñas, adolescentes y mujeres considerándolos objetos y mercancías”.

Reivindicaron también “nuestro derecho a vivir una vida libre de violencias, a decidir sobre nuestros cuerpos y a llevar la vida plena que cada una decida, respetando las diferentes cosmovisiones; nuestro caminar juntas porque frente a la violencia y el despojo, lejos de paralizarnos, actuamos y lo hacemos desde la organización comunitaria y el feminismo por y para las mujeres, porque este es el camino trazado por nuestras ancestras, y el que nosotras hemos elegido para seguir desde la rebeldía y la resistencia en cada uno de los espacios de nuestras vidas”.

De igual forma reivindicaron “a las mujeres que resisten y alzan la voz desde las comunidades y la organización frente a un sistema machista y jerárquico que pone obstáculos para su participación; a las mujeres buscadoras, quienes incansablemente se mantienen en pie; a las mujeres que luchan contra la impunidad, quienes no descansan en su empeño de buscar justicia con valentía y determinación”.