Foto portada: Frayba
Tuxtla Gutiérrez, Chis. 19 Agos.- Unos 200 elementos de la Guardia Nacional, policías estatales y especializada llegaron la tarde este miércoles a la zona de conflicto entre Aldama y Santa Martha Chenalhó, para evitar el fuego cruzado entre las partes en conflicto, informaron fuentes oficiales.
Las autoridades reforzaron la presencia policiaca en el lugar, luego del asesinato del indígena, Javier Jiménez Sántiz, habitante del ejido Santa Martha, presuntamente asesinado por pobladores de Aldama, en el contexto de la disputa de 60 hectáreas que el ejido mantiene desde hace 45 años.
Pobladores de Santa Martha retuvieron y desarmaron a varios policías estatales que estaban destacamentos en la zona, por lo que el gobierno decidió retirar a los demás uniformados que se encontraban en Aldama para evitar que corrieran la misma suerte.
Habitantes de Chenalhó, trasladaron al ejido Santa Martha el féretro con el cadáver de Javier Jiménez Sántiz, luego de realizar una protesta en las puertas del Palacio de Gobierno para demandar que se haga justicia. Chenalhó contabiliza 20 muertos y decenas de heridos en su municipio.
Los inconformes fueron recibidos por el Secretario general de Gobierno, Ismael Brito Mazariegos, alrededor del medio día, donde el alcalde de Chenalhó, Abraham Cruz Gómez, y las autoridades comunales se comprometieron a permitir los recorridos de las corporaciones en la zona de conflicto.
Poco después de las 17 horas, regresaron a Santa Martha para velar a Javier Jiménez Sántiz de 30 años de edad, donde decenas de personas los recibieron. El sepelio está programado para este jueves.
Habitantes de San Martha aseguraron que la situación está tensa en la zona, pero esperan que con la presencia de la Guardia Nacional y de la policía cesen los balazos.
Por separado, autoridades de Aldama afirmaron que este miércoles continuaron los disparos de armas de juego provenientes de Santa Martha Chenalhó.