Fredy Martín Pérez.
Chiapa de Corzo, Chis. 5 Nov.- Desde que se realizó la grabación con contenido erótico en el Cañón del Sumidero, el hombre que tripuló la lancha de la cooperativa Ángel Albino Corzo, no aparece y los rumores son de que está «enfermo y hospitalizado», pero los socios se deslindaron y declararon que estos hechos «denigran» la imagen del parque ecoturistico.
Algunos lancheros consideran que la filmación que se llevó a cabo en el parque nacional, puede ser un atractivo para repuntar el turismo que desde hace ocho meses dejó de llegar a Chiapa de Corzo, como consecuencia de la pandemia.
En los embarcaderos de Cahuaré, algunos lancheros aseguran que la filmación que se llevó a cabo en el Cañón del Sumidero, puede ser un medio para atraer turismo, pero están convencidos que su compañero no se apegó a los protocolos de seguridad, mucho menos a la ley que rige en el parque.
El lanchero Aristeo Martínez dijo a reporteros que el error de su compañero de la cooperativa Ángel Albino Corzo, fue no apegarse al reglamento, es decir, no pidió a los productores de la película, los permisos escritos y autorizados para llevarla a cabo la filmación.
Incluso el lanchero violó los protocolos de seguridad, al momento que las actrices y actores se quitaron los chalecos salvavidas para realizar la filmación, pues se sabe que un actor estuvo a punto de caer al río.
El compañero debió «pedir el permiso» para llevar a cabo la grabación sobre la lancha, ya que se una vez que las personas suben a la embarcación, es el tripulante «el responsable de los que pase» ahí.
Por ejemplo, han habido casos de personas que en estado de ebriedad, han intentado lanzarse al río, por lo que el tripulante debe reaccionar de inmediato y retornar al embarcadero.
Así, cuando ocurren este tipo de incidentes, el conductor de la embarcación, es el responsable de la misma y de la seguridad de los turistas, entonces «debe detenerse y retornar al embarcadero», pero si el pasajero sigue insistieron en tirarse al agua, entonces hay que dar parte a las autoridades para que tomen control de los hechos, explica Martínez.
Aristeo, que es propietario de un restaurante en el embarcadero, contó que en el Cañón del Sumidero es difícil comunicarse a través de teléfono o radio, pues la señal se pierde y por eso cuando ocurre algún incidente, lo que se debe hacer es regresar al embarcadero, para informar a las autoridades de lo que está pasando.
Pero el conductor es el principal responsable de la embarcación y por lo tanto, debe decidir «seguir o no seguir navegando» de acuerdo a la magnitud del problema que deba enfrentarse.
En el Cañón del Sumidero han ocurrido accidentes que ha provocado el fallecimiento de personas algunas que han caído de las embarcaciones por choques con maderos o por alta velocidad con que son conducidas las lanchas.
Las autoridades municipales anunciaron que investigan al propietario de la lancha, para fincar responsabilidades, por infringir la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente.
El miércoles, un comediante chiapaneco llegó al embarcadero con dos jóvenes mujeres, para tratar de hacer una parodia sobre el video de contenido erótico, pero ningún lanchero quiso hacer el recorrido por el Cañón, contaron pobladores.
Agregaron que el mismo miércoles, los socios de las cooperativas Nandiume, Ángel Albino Corzo, lanchas azules y Cahuaré, fueron llamados por las autoridades para sostener una reunión donde se tocó el tema de la filmación de contenido erótico y las consecuencias que pudiera tener el lanchero que transportó a las actrices y actores.
Aunque el ayuntamiento ha dicho que se tomarán las medidas necesarias, para castigar estos hechos, el alcalde Jorge Humberto Molina y el director de turismo municipal, Carlos Macías no han informado este jueves sobre las acciones que vienen, pero tampoco han dicho si algún funcionario municipal sabía de la filmación de la película.
En una carta que suscribieron los líderes de las cooperativa de lancheros, fechada el 5 de noviembre, dicen lamentar los hechos que ocurrieron el pasado 2 de noviembre en el Cañón del Sumidero, «ya que denigran la imagen de uno de los principales atractivos naturales del país, símbolo nuestro estado».
Las actrices y actores que llevaron a cabo la filmación en el parque ecoturistico, «dañaron la imagen de nuestro pueblo y de las sociedades cooperativa, que con disciplina y responsabilidad acatamos los ordenamientos de nuestras autoridades».
Los lancheros que trabajan en el Cañón del Sumidero «somos generadores de empleo para muchas familias» y agregan que ellos no tienen autorización para el uso de embarcaciones para realizar filmaciones, como la del 2 de noviembre y que «reprobamos categóricamente».