Tuxtla Gutiérrez, Chis. 29 Agos.- Personal de la Agencia de Investigación Criminal y policías municipales aseguraron en las playas de Chiapas, 2 mil 068 huevos de tortuga parlama, una especie en peligro de extinción, mientras realizaban vigilancia e inspección en tramos carreteros, informó la delegación de la Procuraduría General de la República ( PGR ).
El primer decomiso tuvo lugar en la carretera Tapanatepec -Tuxtla Gutiérrez, donde la policia federal detuvo a Alaín “M”, de 45 años de edad, quien en tres hieleras transportaba mil 968 huevos del quelonio. El hombre viajaba como pasajero en un autobús de transporte público.
El segundo aseguramiento se hizo tras una denuncia ciudadana en la que reportaron que una persona ofrecía huevos de tortuga parlama a la venta, por lo que elementos de la Policía Municipal de Tonalá, se trasladaron a la Avenida Hidalgo entre calles Francisco Javier Mina y Nicolás Bravo.
“En el lugar observaron a una persona de nombre Laureno R, con las características descritas y al marcarle el alto se echó a correr, tras darle alcance le pidieron permitir la inspección de una mochila que tenía en su posesión, encontrando en su interior 100 huevos de tortuga marina, quedando detenido y puesto a disposición de la PGR”.
La PGR indicó que inició carpeta de investigación contra las dos personas por el delito Contra la Biodiversidad, en su modalidad de productos (Huevos) de Tortuga Marina, especie en peligro de extinción, al asegurar un total de dos mil 68 huevos, derivado de dos aseguramientos.
La dependencia agregó que por recomendación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, los huevos de tortuga fueron entregados, para su preservación al campamento tortuguero de Puerto Arista, en el municipio de Tonalá.
En esta temporada del año se incrementa el tráfico de huevos de tortuga en las costas chiapanecas, ya que en todo el litoral llegan a desovar miles de tortugas.
Ante la falta de vigilancia de las autoridades, los habitantes de la región se dedican al saqueo de huevos para después comercializarlos.
El consumo de huevos de parlama es común en toda la costa de Chiapas, se comercializa en los mercados públicos y en restaurantes de forma clandestina