Tuxtla Gutiérrez, Chis. 16 Abril.- El presidente municipal de Huixtla del partido Morena, José Luis Laparra, “ha creado un ambiente de xenofbia” en contra de los migrantes, desatando una campaña “perversa e inhumana” pidiendo a propietarios de comercios y tiendas cierren por la presencia de los centroamericanos, denunció el sacerdote Heyman Vázquez Medina director del albergue “Nadie es extranjero”.
La noche del lunes, con un altavoz, trabajadores del ayuntamiento recorrieron las calles en vehículos pidiendo a los comerciantes cerraran sus negocios ya que habían llegado al poblado cientos de centroamericanos.
El mensaje que también fue trasmitido por las redes sociales de internet de la presidencia municipal señala: «a la población de Huixtla en general; las autoridades municipales piden su comprensiva participación para resguardarse en sus respectivas casas ante el inminente ingreso de la caravana migrante que usa la fuerza y la violencia para acceder a la ciudad. Evite daños y sustos innecesarios».
A la cabecera municipal de Huixtla, de acuerdo a datos del párroco, entre ayer lunes y este martes han llegado tres grupos de centroamericanos que suman un total aproximado de 4 mil personas.
El contingente de mil personas, fue instalado en un campamento provisional ubicado en las afueras de la ciudad en condiciones precarias porque carecen de agua, sanitarios y ayuda humanitaria. “La gente está comiendo mango verde, por lo que a varios de ellos les ha ocasionado vómito”, señaló el sacerdote.
Los migrantes de ese grupo que llegaron la noche del lunes, se negaron a quedarse en ese campamento, porque en los alrededores no existen tiendas para que compren algún producto, por lo que la mayoría se aloja en un auditorio que está ubicado sobre la carretera que cruza la ciudad.
La parroquia es la única que les ha estado brindando alimentos y agua, y algunas familias se acercan para llevarles mangos; muchos están cansados y ampollados y con escasa ayuda médica, agregó Vázquez Medina.
Por su parte, la organización Pueblos Sin Fronteras aclaró que ningún miembro de esa agrupación esta acompañando ni coordinando caravanas de migrantes ó viacrucis, «pero manifestamos nuestra firme solidaridad con las familias» migrantes.
«Las causas de las caravanas son complejas, reales y legítimas, pero desafortunadamente la forma como el gobierno mexicano -sumiso a la política estadounidense- las ha utilizado para alimentar una situación de crisis con el fin de justificar acciones más de seguridad que de respeto a los derechos humanos”.
Sostuvo que «el discurso del gobierno federal sobre el respeto de las garantías individuales y sobre la migración dista de la realidad, solo se han concentrado en desplegar políticas de desgaste, criminalización, persecución, hacinamiento, contensión y deportación».
Agregó que hace dos días en Mapastepec «la autoridad migratoria no cumplió su promesa de entregar las tarjetas de visitante por razones humanitarias lo que provocó un escenario de mayor desesperación y frustración entre los migrantes que llevan varios días varados en esa ciudad; estan desgastados físicamente, emocional y económico considerables».