Tuxtla Gutiérrez, Chis. 23 Mayo.- El indígena tzeltal, Juan Pérez Álvarez, campesino originario de Amatenango del Valle que se encontraba en huelga de hambre en el penal de Comitán, fue liberado después de permanecer 16 años en prisión, informó Grupo de Trabajo “No estamos Todxs”, organización que realiza el acompañamiento de 6 presos indígenas recluidos en diferentes penales de Chiapas en su protesta en exigencia de justicia y libertad inmediata.
Juan, integrante de la organización Viniketik en resistencia, fue puesto en libertad el pasado 14 de este mes, cinco de sus compañeros permanecen en huelga en los penales de San Cristóbal de las Casas y Comitán en demanda de su libertad inmediata. Denunció que fue torturado durante su detención el 29 de marzo de 2003.
El 8 de mayo, Juan Pérez le había sido notificada su libertad después de llevar más de 16 años recluido, ya que bajo los beneficios penitenciarios de buena conducta su pena se encontraba saldada del delito por el cual había sido condenado, tras una confesión bajo tortura.
Horas después le es notificado que tiene otra acusación por un delito de secuestro que supuestamente cometió en el año 2003 y poco después es trasladado al Ministerio Público para tomarle declaración. Todo esto 16 años después de ese supuesto delito, por lo que decide ponerse en huelga de hambre para lograr su libertad.
Las agrupaciones, entre ellas los centros de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba), Digna Ochoa; Derechos de la Mujer de Chiapas, La Red Todos los Derechos para Todas y Todos, señalaron que otros cinco indígenas se mantienen en ayuno total “exigen al Estado mexicano la revisión de sus expedientes penales; que continúen las investigaciones de las denuncias por tortura y otras violaciones a derechos humanos”.
Durante una visita a los Centros Estatales de Reinserción Social para Sentenciados Número 5, en San Cristóbal de Las Casas y Número 10 en Comitán, defensoras y defensores señalaron que recopilaron los testimonios de Juan de la Cruz Ruiz, Adrián Gómez Jiménez, Germán López Montejo, Abraham López Montejo y Marcelino Ruiz Gómez, quienes denunciaron Tortura, faltas al debido proceso en sus detenciones, tratos crueles, inhumanos y degradantes en prisión, así como discriminación por ser pueblos originarios.
En el texto, las organizaciones de derechos humanos manifiestan su preocupación luego de la visita a los presos en huelga de hambre; “nos preocupa la situación de salud de quienes iniciaron sus acciones de protesta desde el 15 de marzo, por lo que hacemos un llamado a generar las condiciones necesarias que garanticen la revisión constante y atención debida”.
Los presos tsotsiles en huelga de hambre exigen al Estado mexicano: revisión de sus expedientes penales; continúe las investigaciones de las denuncias por Tortura y otras violaciones a derechos humanos; atienda la solicitud de libertad inmediata y garantice la seguridad e integridad de las 5 personas privadas de su libertad que ejercen su derecho de libre expresión y manifestación.
Las organizaciones de la región sureste de la Red Todos los Derechos para Todos exhortan al gobierno de Rutilio Escandón Cadenas y al gobierno de Andrés Manuel López Obrador atiendan las peticiones de los presos en huelga de hambre y en lucha, un total de 20 casos.