La ASF observa a la UPCH falta de capacidad para realizar trabajos; ahora por 3.8 millones de pesos

La UNACH paga “medalla conmemorativa” para Rector

Dos de las universidades de Chiapas se encuentran en plena persecución por parte de la Auditoría Superior de la Federación y la Fiscalía General de la República. La Universidad Autónoma de Chiapas y la Universidad Politécnica de Chiapas fueron parte esencial de lo que a nivel nacional se conoce como la “Estafa Maestra”.

Hace unos días fue sentenciado por un juez federal Ezequiel Orduña Morgan, exdelegado de SEDESOL en Chiapas. Beneficiado por las leyes mexicanas, pagó una fianza y gozará de libertad a cambio de declararse culpable y reconocer que el esquema de la “Estafa Maestra” se realizó en Chiapas; especialmente en la Universidad Autónoma del Estado, la UNACH.

La denominada “Estafa Maestra” es solo uno de los problemas por el que atraviesan las dos universidades que no pueden superar; la UNACH mantiene deudas estratosféricas con el SAT y otras dependencias federales; la Politécnica ha repetido varias veces ese esquema de transferencias financieras ilegales; con la SEDESOL y con SEDATU.

El día de ayer 20 de febrero, la Auditoría Superior de la Federación presentó ante la Cámara de Diputados, la tercera parte de la “fiscalización de la cuenta pública” del 2018 y otra vez, las dos universidades aparecen con irregularidades.

La auditoría 2018-4-99384-23-0136-2019 dice que “durante cinco años consecutivos y como resultado de la fiscalización superior, la ASF ha identificado que de manera irregular las Universidades e Institutos públicos de educación superior, han suscrito diversos contratos, convenios, anexos técnicos y otros instrumentos jurídicos con la Administración Pública Federal”. 

Prosigue la Auditoría Superior de la Federación: “además ha detectado también diversos incumplimientos en cuanto a la ejecución de los trabajos y/o servicios convenidos, derivados de la falta de supervisión, control y seguimientos por parte de las Dependencias y Entidades del Gobierno Federal, contratante, así como pagos injustificados y que no cuentan con la documentación justificativa y comprobatoria respectiva”.

Y remata: “Esta situación ha derivado de la práctica recurrente de realizar adjudicaciones directas con universidades públicas, otros institutos de educación superior o con dependencias y entidades de gobiernos estatales para las adquisiciones, consultorías y servicios, asesorías, estudios técnicos y supervisión; programas de desarrollo social, agrario o territorial; al amparo del artículo 1 de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público (LAASSP) y 4 de su reglamento, sin cumplir con los requisitos mínimos que exigen las disposiciones legales”.

 

La Politécnica de Chiapas otra vez con irregularidades

En la tercera parte de la cuenta pública que la Auditoría Superior de la Federación dio a conocer ayer; la Universidad Autónoma de Chiapas y la Universidad Politécnica también de Chiapas son de nuevo protagonistas por irregularidades, que se suman a las de la “Estafa Maestra”.

En ese sentido, en la auditoría 308-DE a la SAGARPA, dice que la secretaría transfirió recursos públicos federales derivados de la suscripción de convenios con instituciones de educación superior públicas. 

Uno de esos convenios fue realizado con la Universidad Politécnica de Chiapas a pesar de que reiteradamente, esa universidad no contaba con la capacidad para realizar los servicios contratados. El monto que la UPCH no puede comprobar es de 3.8 millones de pesos. 

Los datos pueden encontrarse en el “Documento General Ejecutivo” que la Auditoría Superior de la Federación” tiene disponibles en su portal de internet. 

Los excesos en la UNACH, último año de la gestión rectoral 2014-2018

En la Universidad Autónoma de Chiapas la restricción financiera es evidente. La anterior gestión rectoral a cargo de Carlos Eugenio Ruiz Hernández, actual coordinador de asesores del gobierno del estado fue por decir lo menos; desastrosa. ¿Porqué sería premiado con ese nuevo puesto?

Con deudas impagables, con directores de facultades que eran una especie de “vicerrectores” que no entregaban cuentas a nadie; con grupos de poder dominados por la Secretaría General de ese entonces, la UNACH era un caos. 

Pero cual docentes que tienen algo que enseñar; con la situación financiera que tiene la UNACH; en el último año de la pasada gestión rectoral vimos que el caos financiero no necesariamente significa fin de los excesos.

La auditoría número 2018-4-99020-19-0147-2019 147-DS disponible en la liga http://informe.asf.gob.mx/Documentos/Auditorias/2018_0147_a.pdf relata los excesos de la administración rectoral 2014-2018 de la UNACH; entre otras cosas, se pagó hospedaje al equipo de fútbol profesional “Ocelotes”

Otro exceso es realmente sorprendente: la UNACH destinó recursos “para la elaboración de una medalla conmemorativa para el Rector”. La medalla tuvo un costo de 155 mil pesos. 

La Auditoría Superior de la Federación dice que esos gastos no estaban autorizados para financiarse. 

Finalmente, la UNACH tuvo un saldo negativo de 21 millones de pesos tan solo en el pago de salarios excesivos durante el último año de la anterior gestión rectoral.

Las anteriores gestiones rectorales dejaron un caos financiero en la UNACH del que esa institución educativa no podrá reponerse en el corto plazo. La pregunta es ¿Dónde están los culpables? y otra: esta administración rectoral transparentará todo?

El saldo es que sus destinos ya no solo dirigidos desde la “Colina Universitaria”, ahora también inciden en su agenda interna, la Auditoría Superior de la Federación y el poderoso subsecretario de educación superior de la SEP, Luciano Concheiro.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *