La caravana denominada por la justicia, la dignidad y la libertad del pueblo migrante, salió este viernes del municipio de Acacoyagua, para reanudar su camino rumbo a la Ciudad de México luego de no llegar a un acuerdo con las autoridades migratorias para regularizar su estancia en el país.
Los migrantes, se habían detenido con la esperanza de obtener visas permanentes que les permitieran movilizarse por todo México, reanudaron su camino rumbo a la comunidad de Uluapa, ubicada a unos 18 kilómetros de Acacoyagua, aunque fueron sorprendidos por una fuerte lluvia.
Los extranjeros rechazaron un ofrecimiento del Instituto Nacional de Migración (INM) para otorgarles “tarjetas de visitante” a mujeres embarazadas y menores de edad. Las autoridades ofrecieron entregar tarjetas que sólo les permitirían transitar por cuatro estados, según Irineo Mújica Arzate, director de Pueblos sin Fronteras, uno de los organizadores.
“Sabemos que no vienen con una propuesta seria, vinieron a jugar con las esperanzas de todos los migrantes“, indicó Mújica.
Los cerca de cinco mil migrantes son escoltados por elementos de la Guardia Nacional y policías que los guían en la carretera costera por donde circulan cientos de vehículos de carga pesada y unidades de transporte público.
Las autoridades montaron un fuerte operativo para orientar a los vehículos y evitar que los migrantes se suban a las unidades de carga pesada.
Muchos de ellos se dirigen a la Ciudad de México, pero otros han dicho que a ciudades fronterizas como Tijuana.