Si El presidente López Obrador señaló que hay algunos casos de agresiones, pero “no es una acción deliberada, una embestida”
Tuxtla Gutiérrez, Chis. 23 Junio.- El presidente Andrés Manuel Lopez Obrador dijo que los ataques a comunidades zapatistas en Chiapas, “no son graves, ni extendidos no deliberados; son problemas con los antiguos aliados”.
“En general no ha habido agresiones. Hay algunos casos, pero no es una acción así deliberada, una embestida. Si hay diferencias en las comunidades y ustedes conocen bien la historia”,
aseguró en su conferencia mañanera desde la 7a Región Militar.
Al hablar sobre las denuncias de ataques a las comunidades zapatistas, López Obrador explicó que “cuando surge un movimiento para reivindicar los derechos de los pueblos indígenas, el Estado autoritario promovió la creación de grupos para confrontar a quienes luchaban por la reivindicación de los pueblos indígenas, y eso no desaparece de la noche a la mañana.
Precisó: “no tenemos muchos problemas en lo que tiene que ver con enfrentamientos en las comunidades; sí hay cuestiones que nosotros lamentamos mucho, a veces hay enfrentamientos de grupos, pero estamos atendiéndolos, está la Guardia Nacional y estamos buscando que se dialogue, que se llegue a acuerdos, que no haya represión, y vamos avanzando”.
Afirmó que en general hay paz, hay tranquilidad en Chiapas.
Dijo que en los enfrentamientos entre grupos como lo que ocurre en el municipio de Ocosingo, “está la Guardia Nacional y estamos buscando que se dialogue, que se llegue a acuerdos, no hay represión y vamos avanzando”.
Al abundar sobre las denuncias de simpatizantes zapatistas que aseguran que paramilitares están atacando a las bases de apoyo del EZLN; López Obrador comentó que si bien hay diferencias con el EZLN; reconoció que en su momento el movimiento zapatista fue un llamado de atención para voltear a ver a los más pobres.
“Podemos estar o no de acuerdo con el movimiento zapatista, pero es indudable que en su momento fue una luz, un rayo de esperanza, fue un llamado de atención para voltear a ver a los desposeídos, a los pobres, esos no se puede regatear. Ya lo demás es otra cosa. Pero sí reconocer esa aportación”.
Al referirse al movimiento zapatista el presidente comentó que en su momento en Chiapas, “había organizaciones sociales en Chiapas, como arroz”.
“Es que se convirtió también en un modus de vida el tener una organización social. Y recibían financiamiento supuestamente para ayudar a la gente, y no llegaba el apoyo abajo, se quedaba en las estructuras intermedia, en los asesores, en los intermediarios”.
Dijo sin mencionar nombres que “hay dirigentes de la llamada sociedad civil, e incluso de las organizaciones de defensa de derechos humanos, que no nos ven con buenos ojos, así de claro.
“No olvidemos que cuando nosotros estábamos luchando para lograr un cambio esas organizaciones se oponían a nosotros, llamaban a no votar, y era legítimo el que pensaran que la única alternativa era la vía armada, que por la vía pacífica no se iba a poder, y consideraban que nosotros éramos falsarios, llegaron a cuestionarme muy fuerte”.
Entonces, no han cambiado en eso, manifestó. Pero “se esmeran en sostener que somos iguales”.
López Obrador afirmó que en la región “poco a poco se ha ido restableciéndose la estabilidad, la paz. Creo que nosotros hemos ayudado mucho, porque en programas como Sembrando Vida hay reencuentros de quienes estaban confrontados, participan todos. Porque se produjo mucha división abajo”.
“Entonces, poco a poco se ha ido logrado la unidad y lo vamos a seguir haciendo, respetando a todos, pero pues también informando y aclarando las cosas”.
Señaló que a diferencia de otros gobiernos, “no hay vuelos rasantes; no hay represión. Nunca voy a dar la orden de reprimir al pueblo, nunca voy a dar la orden de masacrar al pueblo, de torturar a la gente, de violar derechos humanos”
“Entonces, como no tiene razón, se esmeran en sostener que somos iguales”.
Lopez Obrador refirió: “Porque ahí, donde estaban estas organizaciones de izquierda, ahí arrasaba el PRI en las elecciones, ahí es donde había casillas zapato, entonces se quedaron, no las comunidades, no el pueblo no, no las comunidades indígenas, no el pueblo, no, no, los dirigentes y sus asesores”.
“Ustedes conocen bien la historia”, dijo López Obrador en la sesión de preguntas y respuestas.
Aunque reconoció que cuando surge un movimiento para reivindicar los derechos de los pueblos indígenas, el Estado promueve, “el Estado autoritario promueve la creación de grupos para confrontar a quienes luchaban por la reivindicación de los pueblos indígenas, y eso no desaparece de la noche a la mañana”.
“Somos distintos, lo que pasa que pues ellos se quedaron en el almanaque”